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Una reliquia del Imperio Romano volvió recuperada a Plaza Italia

Una reliquia del Imperio Romano volvió recuperada a Plaza Italia

Es de mármol y fue encontrada durante excavaciones en el antiguo foro imperial.

Martina Perdiguero
25/06/11Clarin.


Una columna de alrededor de 2.000 años de antigüedad extraída del Foro Romano volvió a brillar ayer en Plaza Italia. La pieza, de 1,9 metro de alto y 55 centímetros de diámetro, fue restaurada y colocada otra vez junto al monumento a Garibaldi en una ceremonia en la que hasta hubo dos hombres vestidos como los guardias romanos .


Hecha en mármol, la columna es una de las reliquias más antiguas que hay en Buenos Aires y se fue deteriorando con el paso del tiempo. Estaba cubierta de hollín y hasta se quedó, luego de un robo, sin la placa de bronce que la identificaba. Pero ayer volvió a mostrarse en todo su esplendor gracias a una iniciativa de la Asociación Romana y de Lazio en Argentina, que contó con el apoyo del Gobierno de la Ciudad.


“Vimos que la columna estaba arruinada y presentamos una nota en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público en febrero. Ellos nos pusieron en contacto con el Departamento de Monumentos y Obras de Arte y en menos de lo que canta un gallo conseguimos que la restauren”, contó con una mezcla de orgullo y emoción Luigi Provenzani, Presidente de la Asociación.


Invitados por el Cónsul de Italia en Buenos Aires, gente de colectividad italiana que reside aquí participó de la ceremonia en la que se presentó la restauración, que también sirve para conmemorar los 150 años de la unificación de Italia en 1861.


“Yo siempre pasaba a ver la columna con mi marido porque ver algo nuestro en Argentina, que nos pertenece, nos hacía recordar a nuestro país”, contó María Natalia D’Agostini mientras recordaba los 63 años que hace que vive acá.

“Es un orgullo tener un pedazo de Roma en Buenos Aires, que es una de las ciudades más lindas del mundo y de donde la mayoría de los argentinos venimos”, reflexionó el Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.


La columna de Plaza Italia es uno de los tesoros del Imperio Romano que se conservan y fue extraída durante excavaciones que se hicieron en el área del Foro, donde se concentraba la mayor parte de las actividades, como el comercio, los negocios, la prostitución, la religión y la administración de Justicia.


Fundada como una aldea, Roma se convirtió en uno de los imperio más grandes de la historia de la humanidad. Durante varios siglos practicó una política de expansión territorial que llevó al Imperio hasta una extensión máxima estimada en unos 6,5 millones de kilómetros. Y ocupó gran parte de Europa, Asía y Africa. Luego fue divido en dos: Oriente y Occidente. Y el legado cultural, religioso e histórico que dejó para la humanidad fue notable. Tanto es así, que la caída de Occidente, hacia el año 500 después de Cristo, marca el final de la Edad Antigua y el inicio de la Edad Media.


La columna que está en Plaza Italia había sido donada en 1955 por la Alcaldía de Roma y primero fue emplazada en Libertador y Luis María Campos, hasta que en 1984 fue trasladada a su actual ubicación.


Y para celebrar el 150° aniversario de la unificación de Italia, los romanos residentes en Argentina seguirán restaurando otros monumentos italianos en la Ciudad. Por ejemplo, también se ocuparán de mejorar en poco tiempo más la “Loba romana” que está en Parque Lezama, a la que le habían robado en 2007 a los mellizos Rómulo y Remo. El conjunto representa la leyenda de los hermanos gemelos que fundaron Roma y fueron amamantados por una loba.

Taxistas porteños

Por la inseguridad, nuevas fichas para identificar a los taxistas porteños


Identifican al auto, al conductor y a la empresa de radio taxi. E informan las tarifas.

Por Silvia Gómez
25/06/11 Clarin.




DOS CARTONES. EN EL PRIMERO SE IDENTIFICA AL CONDUCTOR. EN EL SEGUNDO, AL VEHÍCULO Y LAS TARIFAS. ALLÍ SE INCLUYE EL RECIENTE AUMENTO POR HORARIO NOCTURNO, Y TAMBIÉN LOS ADICIONALES.



Ya comenzaron a verse las nuevas fichas de identificación en los taxis porteños. Se trata de fichas con información detallada sobre el conductor, el vehículo, las empresas de radio taxi y datos anexos al servicio, como el costo de la bajada de bandera y de las fichas. En las que además se publican teléfonos para hacer denuncias y quejas . A partir de agosto todas las unidades deberán contar con estos cartones amarillos, que tendrán que estar colocados en la parte trasera de la cabecera del asiento del acompañante: a la vista de los pasajeros .


La nueva identificación, que reemplaza a las que ya existen, cumple con las exigencias de la ley de servicio del transporte público de pasajeros de taxis, la 3.622, que entró en vigencia a principio de año. Hasta fines de julio los taxistas podrán retirarlas en SACTA –la empresa concesionaria de la emisión y renovación de licencias– y en la calle, de 8,30 a 14: los lunes en Aeroparque, martes en Bernardo de Irigoyen al 1.000, miércoles en Santa Fe al 3.100, jueves en Rivadavia al 7.300 y viernes en Avenida de Mayo al 900.

Para los pasajeros se trata de contar, a simple vista, con información mas detallada sobre el conductor y el auto. “Hasta ahora había mucha diversidad de formatos. La idea es que las nuevas fichas aporten más información y seguridad a los pasajeros”, detalló Guillermo Dietrich, subsecretario de Tránsito porteño.


A partir de agosto los taxistas que no tengan la nueva ficha serán amonestados: a la tercera amonestación se les retira la licencia habilitante por 30 días.


En el último año la Subsecretaría de Transporte controló 18.300 taxis, de un total de 37.000 que circulan por la Ciudad. Casi 900 fueron sancionados por no contar con licencia, VTV vigente o por circular en condiciones deficientes. Veintiocho fueron retenidos por faltas graves y tres fueron denunciados penalmente por no tener la licencia habilitante.

Vecinos contra las torres.

UNA ASOCIACIÓN VECINAL PIDIÓ EL AMPARO


Freno a la construcción de una torre de 27 pisos

Publicado el 25 de Junio de 2011
Tiempo Argentino.


Una jueza porteña frenó la construcción de una torre de 27 pisos detrás de un centro comercial por el planteo de la asociación vecinal Amigos Alto Palermo, que cuestiona el impacto ambiental de la obra y que allí se erigirán más metros cuadrados de los habilitados por las normas comunales de la Ciudad de Buenos Aires.


Andrea Danas, titular del juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario Nº 9 de la Ciudad de Buenos Aires, suspendió como medida precautelar la edificación en Beruti 3351/59, entre la Avenida Coronel Díaz y Bulnes, e intimó al gobierno porteño a que en el plazo de cinco días remita los expedientes administrativos 28.831\2009 y 10.788\2009 con los que se había autorizado comenzar los trabajos.


Los vecinos aseguran que el complejo incumple normativa urbanística porque se proyectó una superficie de 32 mil metros cuadrados, cuando en esa manzana sólo están permitidos hasta 10.681 metros cuadrados. Además de que la construcción se erigirá "prácticamente sobre la línea municipal", los vecinos "resaltan que además se prevé la construcción de 200 cocheras no sólo para uso de la torre, sino comercial, generando con ello un intenso movimiento adicional de automóviles, en una zona en la que ya existen más de 5000 espectadores que asisten diariamente al complejo de cines Cinemark Beruti, que se ubica a 30 metros del terreno donde se va a construir la torre. Aseguran que en el fin de semana la cifra de concurrentes a los cines asciende a la suma de 10 mil", puntualiza el fallo de la magistrada, al que tuvo acceso Tiempo Argentino.


Según la jueza, "dadas las condiciones hasta el presente analizadas, bajo las cuales se ha autorizado la construcción de la obra impugnada, su prosecución aparece en esta instancia como más gravosa pues su modificación ulterior, si finalmente se decide que vulnera los parámetros previstos en la normativa aplicable, sería más perjudicial que su suspensión temporaria hasta que se agregue la documentación reseñada en el párrafo precedente".


La obra en cuestión es de Alto Palermo SA, la misma empresa que regentea el centro comercial homónimo, que está en frente de esta obra, y otra decena de shoppings más.

Teatro San Martin

LA SALA A - B, LA DE MAYOR CAPACIDAD, ESTÁ CERRADA DESDE HACE CINCO AÑOS Y FUNCIONA COMO DEPÓSITO

A pesar de los anuncios, el Centro Cultural San Martín está en ruinas

Por Christian Boyanovsky Bazán
Publicado el 25 de Junio de 2011
Tiempo Argentino.


El gobierno porteño se apresta a inaugurar una obra en un sector del edificio, pero en el resto se observan roturas de todo tipo. Hay techos con agujeros, boquetes en las paredes y baños destruidos. Harán un pedido de informes.


Aunque el macrismo inaugurará una obra millonaria en el emblemático Centro Cultural General San Martín de la Ciudad de Buenos Aires, las condiciones de la histórica torre, y sus salas principales, así como la oferta de un espacio que supo nutrir a la ciudad de arte y cultura contrastan seriamente, por el franco y sostenido deterioro de hace años. Los trabajadores denuncian que el edificio, cuyas obras de remodelación debieron iniciarse en diciembre de 2006, sufre una notoria falta de mantenimiento que se percibe a simple vista: techos agujereados, sanitarios rotos, boquetes en las paredes. De cinco ascensores, suelen funcionar sólo dos con regularidad, y la mayoría de las veces, apenas uno. La Sala A-B, la de mayor capacidad (mil butacas), está cerrada hace cinco años y funciona como depósito de mobiliario y acopio de material.

Esto forma parte de lo que los trabajadores consideran que es "la ausencia de un proyecto cultural integral". En esa línea, mencionan que los diversos cursos que ofrece el centro observan una reducción de inscriptos de 4200 en su momento de mayor convocatoria, en 2004, a apenas 1500 en estos días. "No tenemos difusión, ni materiales para trabajar, pedís mate y te traen té", comentó un empleado en una reunión que tuvo Tiempo Argentino con una veintena de empleados de los diferentes sectores del centro cultural. Excepto por los delegados gremiales, Alejandro Flores, Sandro Leal y Jorge De Martini, la mayoría prefirió reservar su identidad "por temor a represalias".

El caso del Centro Cultural llegará a la Legislatura, cuando la diputada porteña Gabriela Alegre (EPpV) presente un pedido de informes al Ejecutivo en el que trabajaba su equipo. El borrador, al que accedió este diario, solicita información sobre la "nómina completa de cursos y talleres" y la "cantidad de alumnos inscriptos" desde 2008 hasta hoy. También "la cantidad de docentes" y el "estado de las obras de remodelación y ampliación (bajo plaza) del Centro Cultural General San Martín, especificando los motivos por los que se ha cerrado la Sala A-B del complejo para utilizarla como depósito e indicando para cuándo se tiene prevista su reapertura". La legisladora visitó el edificio días pasados y, al igual que Tiempo, pudo "constatar la paralización absoluta de remodelación de las obras" y el estado general del centro. "Esta desidia forma parte del vaciamiento de la política cultural que lleva adelante el jefe de gobierno, quien decide vaciar lo público y favorecer lo privado", comentó Alegre a Tiempo.


Uno de los trabajadores recordó que la función del San Martín tenía un impacto cultural y social en la comunidad. "Hacíamos espectáculos gratuitos o de muy bajo costo, ahora se maneja todo con una lógica más comercial. Antes este lugar era el sitio de referencia cultural de toda la ciudad, se daba la oportunidad a todos. Acá tocó (Luis) Salinas cuando no lo conocía nadie", expresó uno de los iluminadores. Actualmente, la mayoría de los contenidos artísticos se derivan al Teatro 25 de Mayo, de Urquiza. Esta escasez de actividades genera, en los empleados, el temor de quedarse sin tareas que justifiquen su pertenencia a la planta que hoy es de 250 permanentes y más de 30 contratados.

Las tres obras de remodelación (sobre la torre, la sala A - B y el bajo plaza) comenzaron en 2007, pero el año siguiente, con la llegada del macrismo "se paró todo". Sólo continuó el sector de cinco subsuelos bajo la plaza seca, que Macri planea inaugurar antes de las elecciones en la Ciudad. Se trata de una remodelación que tendrá salas de cine, y eventos múltiples, que se realizaron sobre los cinco pisos subterráneos que ya existían. Una obra que según versiones periodísticas demandó 36 millones de pesos y que en el San Martín afirman que a pesar del anuncio el sector "no está equipado, faltan aires acondicionados y sonido". Los trabajadores denuncian el contraste entre esa obra que llaman "faraónica" y la "desidia" que se observa en los siete pisos de la torre afectados al centro cultural, desidia que, dicen, fue progresiva a lo largo de los años, y se "agudizó con la llegada de Macri".


Tiempo Argentino intentó hablar con la directora María Victoria Alcaraz, pero el personal del Centro la excusó por estar "en una reunión" y derivó el tema al Ministerio de Cultura porteño, de donde depende el San Martín. El vocero del Ministro Hernán Lombardi no respondió el llamado de este diario.

pAKA pAKA

Un analisis del canal infantil
Pakapaka: inteligente y para clase media, según expertos

El kirchnerismo lanzó una cruzada nacional para que Cablevisión incorpore la señal infantil Pakapaka, del Ministerio de Educación, a su grilla de canales. ¿Es una propuesta tan excepcional? Pipo Pescador y las especialistas Mirta Goldberg y Analía Segal lo debatieron para PERFIL. Consideran excelentes los aportes educativos y elogian que trate a los chicos como personas y no como consumidores. Pero dicen que sólo apunta a niños de clase media.


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Modelo. Una señal con contenidos "a la altura de las mejores producciones del mundo", dice Pipo Pescador.



Pakapaka, el canal de programación infantil del Ministerio de Educación, nació como franja infantil de Encuentro y hace menos de un año llegó a tener contenidos propios y transmitir 24 horas. Así se convirtió en un punto más de fricción entre el Gobierno y el G rupo Clarín, a partir de la discusión por su incorporación a la grilla de Cablevisión.

"Pakapaka para todos" es la consigna con la que el ministerio salió a defender su canal. La idea de reunir niños y niñas para que se manifestaran frente al Palacio Sarmiento, sede de la cartera educativa, y reclamar su derecho a ver un canal que, además de entretener, educa, no deja de ser llamativa y hasta simpática. La movilización infantil, más o menos espontánea como la mayoría de las protestas, resulta un escenario impensado en la Argentina de hace unos años.

La peculiaridad de la discusión despertó la curiosidad a PERFIL. ¿Qué será lo distinto que ofrece Pakapaka a los chicos? ¿Es posible entretener y enseñar desde la pantalla en tiempos en los que los puntos máximos de rating los concentran programas que muestran cuerpos semidesnudos de mujeres, la grosería fácil y muchos gritos?

A partir de esa pregunta, se convocó a tres especialistas de reconocida trayectoria en el mundo de la producción de TV infantil, la educación y las nuevas tecnologías para pedirles su opinión. La propuesta era meterse de lleno una semana viendo Pakapaka y luego hacer un análisis objetivo y profesional de sus contenidos.

Aunque la propuesta no incluía la pregunta sobre si el canal tenía que estar o no en la grilla, la conductora de Caminos de tiza (Canal 7), Mirta Goldberg, quiso dejar clara su posición: "Celebro que por primera vez en nuestro país un gobierno tome la decisión política de financiar y habilitar una programación específica para la infancia en TV y rechazo la censura-omisión de Pakapaka. Es una medida arbitraria, sin argumentos y sin propuesta alternativa".

Pero también aclaró que el canal "no empezó de cero", sino que se construyó tomando la experiencia de programas exitosos producidos en canales privados en las décadas de los 70 y 80, como el de Pipo Pescador, Este es mi mundo, El agujerito sin fin, Ta-te-ti con Las Trillizas de Oro (Canal 13); Verde libre, conducido por Cristina Banegas en Canal 11 y el Cablín, de la década del 90. Goldberg se ocupó de rescatar también la experiencia de programación infantil de Canal 7 entre 2006 y 2007. 

El debate. El primer planteo de PERFIL fue qué distingue a esta oferta de otra similar.

PIPO –tomó la delantera–: Nunca una programación de TV infantil en la Argentina alcanzó este rango. Está a la altura de las mejores producciones del mundo, como lo fue en su momento Plaza Sésamo. Algunos programas me gustan más que otros, pero la calidad visual es óptima, las escenografías eficientes y los actores brillan por su ductilidad.
SEGAL: Lo mejor de la propuesta es que coloca a los niños en otro lugar, los mira como personas y no como consumidores, apela a sus ideas, apuesta a sus intereses: la fantasía, la curiosidad, el mundo de los animales, las ciencias y cuestiones sociales como la amistad, la solidaridad y algo de sus preocupaciones amorosas. 
GOLDBERG: Hay grandes logros y así debe ser porque contaron con un buen presupuesto, libertad y tiempo. Con todo eso a favor, los resultados están a la vista: muchísimo material producido, diverso, sin violencia ni ritmos caóticos, sin gritos, sin chabacanería, desde una mirada federal, con paisajes y testimonios que recorren el país y aportes a la construcción de la ciudadanía desde los valores, la inclusión y el respeto a las diferencias.
—¿Qué programa es el que más les gustó?
S: Varios, pero Hotel de los zombies (una producción francesa) me pareció muy desafiante. Se mete de una manera humorística a discutir las normas, pone en cuestión la idea de que siempre hay un "mimado" de la maestra. En el resto de la programación encontré mucho más "deber ser", lo correcto. En otros programas no aparece demasiado aquello que no está bien. En cambio en Hotel... se meten con los malos pensamientos que siempre están. 
P: Mis preferidas fueron las autobiografías donde los niños cuentan su vida, muestran su cuarto, presentan su familia y expresan sus sentimientos. La primera que vi era un niño entrerriano que me tocó el corazón porque recordó mi propia infancia. 
G: Chikuchis es quizás uno de los más logrados, con una buena canción de apertura y muchos logros artísticos. Bien trabajados los vínculos chicos-grandes, nena-varón y los valores: discutir, compartir, cooperar. Hotel de zombies tiene una estética muy original. 
P: Y Chicos del mundo es sencillamente perfecto. La narración breve de las características del país y el compartir una actividad con niños originarios. También me encantó el Taller de cuentos, donde el abuelo mecánico narra historias de tradición argentina. No hay mansiones ni jets ni super lanchas, ni niños archi ricos que pueden comprar cualquier cosa, sino pibes comunes, emocionados con la naturaleza, con la contemplación de la vida diaria como fuente de magia. 
—¿Tienen críticas puntuales?
G: Sí. En Cazurros al 2, ¿por qué todos hombres? Y justo en ciencias y matemática, donde los estereotipos indican que las mujeres somos inferiores. También observé en Calibroscopio, que no se genera curiosidad por la lectura. Además, aparece (la actriz) Julieta Díaz leyendo un cuento, pero lo lee de hojas blancas no de un libro. Se usan todo el tiempo libros de escenografía y es sabido que la lectura se promueve con libros de verdad. 
S: Yo dudo sobre Mediadores. No sé bien. Es un tema, el de la mediación escolar, que a veces funciona en las aulas, pero en la pantalla aparece poco resuelto, se llega a la solución del conflicto demasiado rápido, con chicos que actúan las situaciones y no se torna creíble.
G: Ahí el problema es la edición. Hay que tener cuidado porque por dar prioridad al ritmo se pueden omitir dichos fundamentales de los mediadores o mediados. Para mí, el tema no justifica un programa de televisión.
P: Desde este lugar difícil, de crítico-colega, hablo sólo sobre lo que vi y fue una parte. Quiero ser respetuoso en ese sentido, pero me parece que hay cierta tendencia de algunos actores a expresarse con maneras muy marcadas, como haciéndose los niños y ganarían más si se movieran con naturalidad evitando las maquetas. 
—¿Qué le suma que no tenga publicidad? 
P: Eso es lo mejor; es fantástico. Quiero creer que significa también que no usarán los medios del Estado para crear o auspiciar subproductos comerciales, sino para sostener una programación argentina, con artistas argentinos y destinada a elevar la calidad cultural de nuestros niños, sin que ningún compromiso empresarial perturbe o condicione y les quite a los autores y creativos la libertad de hacer lo que consideren honestamente bueno. Los autores deben pensar libremente la programación sin tener que acotarlo a una posterior explotación de productos, que puede ser un CD o una temporada en la calle Corrientes (ver recuadro). 
S: Que no tenga publicidad es lo mejor. 
G: Es bueno porque cuando la programación infantil en la TV comercial dejó de ser negocio directamente buscaron productos que asimilaran a los chicos a los gustos de los adolescentes: Clave de Sol, Chiquititas y todo lo que siguió con Cris Morena son buenos ejemplos de programas que instalaron conflictos artificiales para los más pequeños. Ese corrimiento lo impuso el mercado y aceleró a los chicos que terminaron quemando etapas. 
—¿Y qué le falta? ¿Qué mejorarían?
S: Productos para el público preadolescente y adolescente, sin dudas. Sería muy bueno. Y cuidarse más de un formato que es un poco escolar, desde un punto de vista, con predominancia de imágenes de los pibes en las escuelas. 
G: Habría que investigar más para dar cabida a las múltiples producciones culturales que ya existen en la Argentina. Y articular con necesidades concretas de los chicos que se hayan observado en nvestigaciones del Ministerio de Educación y de Desarrollo Social. 
La pregunta final llegó intempestiva para los especialistas.
—¿Conocen chicos que vean Pakapaka? ¿Les gusta?
P: Justo hoy les pregunté a varios. No muchos, solamente unos cinco o seis niños. Ninguno de ellos lo conocía. Ven otros canales.
S: Sí, conozco, pero aclaro que son todos chicos de familias de clase media. 
G: Sólo uno, de Neuquén, cuyo padre dice que le encanta porque lo puede dejar solo todo el día frente a la pantalla sin ningún resguardo.


La combinación de estética y contenido

Sol Canesa, Emiliano Larea y Vicki Almeida son algunos de los actores que están al frente de los programas de Pakapaka. La actuación en la pantalla es sólo un recurso. Se combina con animación, 3D, muñecos gigantes y músicos, todos juntos al mismo tiempo puestos al servicio de un mensaje que la mayoría de los programas transmite.

"La cuestión estética es súper importante. Buscamos propuestas que nos diferencien de otros canales. Y que, desde el punto del contenido, tengan un impacto educativo, que no significa didáctico ni pedagógico", explicó a PERFIL Cielo Salviolo, responsable de Pakapaka.

El trabajo de los actores en este canal pareciera estar pensado como un complemento del contenido. No son los ídolos ni las estrellas a las que nos tiene acostumbrados la televisión comercial.

Jazmín Moldovan, directora de actores de Fauna Casting, opinó que Pakapaka "se sirve del lenguaje actoral para que el mensaje o la cuestión pedagógica se ponga de manifiesto. Las elecciones actorales y sus estéticas parecen atinadas para lograr el objetivo que, en ningún caso, se esconde. Falta un poco más de locurita, de cuestión lúdica y de apertura".

Piero Bona, desarrollador de nuevos medios en el estudio DFCL, vio como positivo que una estética en la que "se baja un cambio". Hay "un hilo narrativo en todo el canal. Se utilizan diversas técnias, 3D, efectos, pero todo está suelto estéticamente"


FUENTE: 
http://www.perfil.com/ediciones/2011/6/ ... _0069.html