El superhéroe urbano que atrae a los turistas en Caminito
Esteban Florentín, de 67 años, sorprende a los extranjeros con su personaje del “Hombre Hormiga”.
PorARIEL CARAVAGGIO | clarin 16.01.11
No interponerse entre el lente de una cámara digital y el fotografiado resulta imposible. Cientos de turistas se agolpan entre los bares y bailarines de tango de Caminito . Viejos cantores, estatuas vivientes, enanos y hasta el doble de Maradona están allí. Pero el objetivo no aparece. Hasta que de repente se lo ve. Sus antenas primero, la capa roja ondeando al viento después. En La Boca, como en José C. Paz, su ciudad de origen, el Hombre Hormiga es un superhéroe tan popular como Batman. Pero mucho más real.
Con una media devenida en antifaz cubriendo su frondosa barba, Esteban Florentín (67) cuenta que con la mayoría de edad decidió dejar atrás su infancia en Corrientes y viajar a Buenos Aires. Pero las ventajas de un buen sueldo como barman en La Rural trajeron la peor etapa de su vida. “Empecé a enloquecer, tomaba mucho y no me querían alquilar la habitación. Me pude comprar un terreno en José C. Paz y me fui a vivir ahí”, repasa.
Se recuperó de su adicción en Alcohólicos Anónimos y la ayuda grupal que recibió comenzó a transformar su visión del mundo. “Desde chico veía que las hormigas representan fuerzas pequeñas, que si no trabajaran en conjunto no podrían ser nada. Eso es lo que tenemos que entender”, dice.
Su personaje surgió en el cumpleaños de un nene del barrio . “Su mamá no tenía plata para contratar un animador. Así que corté una botella de gaseosa, le di color con trapos y usé una tela como capa. Descubrí que los chicos se divertían muchísimo. Ahí me di cuenta de que La Hormiguita podía servirle a mucha gente”, recuerda.
Desde 1982, antes de volverse una atracción en La Boca, con su personaje armó varias cruzadas solidarias en José C. Paz. Pero fue en Caminito donde atravesó las fronteras nacionales. Turistas de Italia, México y España se llevan sus fotos y artesanías (pequeñas hormigas colgantes), y luego le mandan mails. Y un cineasta chileno filmó un documental sobre su vida (ver Es de película ).
Si le preguntan a qué se dedica o cuál es su objetivo, el Hombre Hormiga es claro. “Ser libre”, responde, sin mencionar que ayuda a cuanto necesitado se cruza, que tiene un programa de radio y que fundó un grupo de poetas. Y remarca: “Muchas veces la gente me mira raro, y escucho que dicen ‘¡Y éste de dónde salió!’. Yo me río y les contesto: ‘De un hormiguero’”.
