jueves

Megaplán para el sur de la ciudad

Proyecto

Discute la Legislatura el

Supone una inversión de $ 3000 millones en cinco años; quieren aprobarlo antes del 10 de diciembre
Por Laura Rocha  | LA NACION

 






El estadio Ciudad del Rock, inaugurado en septiembre, es una de las obras hechas en Villa Soldati. Foto: Oliver Kornblihtt / AFV


Una modernísima terminal de ómnibus de media y larga distancia, 2200 viviendas sociales, un polo farmacéutico y la extensión de la línea E de subtes hasta Lacarra. Éstas son sólo algunas de las instalaciones quepretenden poner en valor a una zona postergada de la ciudad, la comuna 8, compuesta por los barrios más pobres del distrito. El plan de obras es ambicioso y ya genera polémica.
La transformación de la comuna, que implica una inversión estimada en 3000 millones de pesos para los próximos cinco años, está incluida en un master planque el Poder Ejecutivo porteño pretende discutir y aprobar antes del 10 de diciembre en la Legislatura.

El debate no estará libre de obstáculos. Y es que, aunque la comuna compuesta por Villa Riachuelo, Villa Soldati y Villa Lugano es una de las que más espacio libre conservan, las catalogaciones del suelo no permiten estas obras de infraestructura.
"Se trata de un cambio fenomenal para el sur de la ciudad. No sólo va a traer inversión privada, sino también nuevos espacios y servicios que los porteños podrán disfrutar. Sólo la Villa Olímpica supone una inversión de unos 1200 millones de pesos", indicó Cristian Ritondo, presidente del bloque Pro, quien también explicó que las instalaciones para los 3500 atletas que llegarán a Buenos Aires en ocasión de los Juegos Olímpicos Juveniles serán luego viviendas sociales.
"Si a eso se suma el polo farmacéutico; el centro de carga y descarga de camiones, y el distrito del deporte, que llevará al Sur las fábricas de indumentaria, entonces queda claro que la inversión y los beneficios se multiplican", agregó el vicepresidente primero de la Legislatura, que aspira a debatir la cuestión antes del recambio del 10 de diciembre próximo.

Según el proyecto, los objetivos del master plan de la comuna 8 son recuperar el espacio público, impulsar la producción y el empleo, reequilibrar el territorio y mejorar las condiciones de integración social, proteger el patrimonio urbano y desarrollar sistemas de transporte masivos de pasajeros que conecten a la comuna con otras zonas de la ciudad.
Cabe recordar que la comuna tiene 21,7 km2 y una población total de 161.642 habitantes que poseen los índices de educación y sanitarios más bajos de todo el distrito.
A lo largo del proyecto se rescata la necesidad de articular las acciones con las llevadas a cabo por la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), así como por otras áreas del sector público con influencia en el territorio. Según se destaca, "se impulsará el desarrollo de la sede comunal como centralidad política con potencialidad para agrupar actividades diversas en su entorno. Y se intentará articular con el transporte público masivo, alineando la centralidad comercial con el Premetro".
Sin embargo, este megaproyecto despierta resistencias. "Aunque no está la ley, ya se van presentando planes escalonados sin detallar. Incluso utilizan el argumento de las viviendas populares, pero eso es una excusa para ocultar que lo que buscan en realidad es favorecer a las constructoras privadas", opinó Alejandro Bodart, diputado de la izquierda (MST).

"El otro tema es el de la multiplicación de los distritos. Las empresas beneficiadas no pagan impuestos o tienen muchos beneficios que luego no son evaluados detalladamente. Al mismo tiempo, hay mucha resistencia de los vecinos porque ellos siempre han sido muy postergados. Desde el punto de vista de la salud, por ejemplo, cero: sólo hay una salita en donde tendría que haber un hospital", agregó.
En ese sentido, Ritondo indicó que se culminará con la obra del hospital y que el hospital de referencia, el Santojanni, ya cuenta con un helipuerto con vistas a los Juegos Olímpicos. "No es cierto que el proyecto implique la pérdida de espacios verdes; en realidad, con la urbanización de villas se sumarán plazas."
El master plan de la comuna 8 forma parte del paquete de leyes que sólo obtendrían los votos necesarios tras un acuerdo, ya sellado, entre el bloque oficialista y el kirchnerismo. Se trata de un amplio cambio de zonificación para los proyectos inmobiliarios antes mencionados y, también, la construcción de un shopping en Caballito, entre otros.

Este acuerdo es alimentado por el recambio de 30 legisladores el 10 de diciembre y la designación para ocupar unos 28 cargos públicos en distintos organismos de la ciudad por parte de la Legislatura: Defensoría del Pueblo, Ministerio Público, Ente Único Regulador de los Servicios Públicos, Consejo del Plan Urbano Ambiental y Consejo de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes de la Ciudad.
Por el momento, hasta el 14 de noviembre la Legislatura no sesionará, ya que el lugar hoy funciona como depósito de las urnas de las recientes elecciones legislativas. Sólo quedan tres jueves para convocar sesiones ordinarias. Los resultados electorales y los futuros acuerdos darán la respuesta definitiva sobre la viabilidad del megaproyecto.

lunes

Torre Prourban

El rulero en dos historias: de las peluquerías a un edificio icónico
El cilindro plástico para hacer rulos inspiró el nombre popular de una torre. Fea para muchos pero que no pasa desapercibida.
Pellegrini y Libertador. La Torre Prourban (nombre real) cumple 30 años.

23/12/13
La opinión de la gente parece inapelable: lo consideran el tercer edificio más feo de la Ciudad. El dato surgió de una encuesta que la Consultora D’Alessio Irol realizó entre 600 personas que no son ni arquitectos ni constructores. La consulta fue para el suplemento ARQ y Clarín la publicó ayer en la sección La Ciudad. El edificio tiene 100 metros de altura y 30 de diámetro, está en la esquina de Carlos Pellegrini y avenida Del Libertador, en Retiro, y su nombre es Torre Prourban. Sin embargo, por su forma cilíndrica y desde hace muchos años, esa misma gente lo denominó simplemente como “El Rulero”.

El porqué de esa definición se basa en un elemento que, hasta hace no muchos años, fue muy usado en las peluquerías de damas, para rizar el cabello. Era un cilindro de plástico con un enrejado pequeño en el cual se enrollaba el pelo y se dejaba por horas para después darle un marcado especial. Los había de distinto tamaño. El edificio de Retiro se asemeja a uno de aquellos instrumentos de “belleza” que se reemplazaron con las actuales bucleras eléctricas.

Lo cierto es que la Torre Prourban o “El Rulero” ya lleva 30 años en esa esquina porteña. Se empezó a construir en 1979 y se terminó en 1983. Las empresas encargadas de la obra fueron las constructoras Eugenio Grassetto SA y Sideco Americana SA. Se basaron en el proyecto que en 1978 la desarrolladora Creaurban (era del Grupo Socma, que lideraba el empresario Franco Macri) le había encargado al estudio de Flora Manteola, Javier Sánchez Gómez, Josefina Santos, Justo Solsona y Rafael Viñoly, quienes tuvieron como arquitecto asociado a Carlos Salaberry. Así surgió ese diseño tan particular de hacer un edificio redondo. Los especialistas dicen que en los cuerpos centrales del barrio Comandante Piedrabuena, en Villa Lugano, ya había alguna construcción con ese formato. Pero el que primero se destacó aquí fue éste.

El edificio de Retiro (su acceso se encuentra en el número 498 de avenida del Libertador) está construido en un terreno que tiene unos 4.200 metros cuadrados. Pero no se usaron en su totalidad, justamente para poder crecer en altura. La estructura está hecha en hormigón opaco y moldeado con otras estructuras metálicas. Eso permitió que quedaran las ventanas cuadradas que tienen vidrios de dos metros por lado. El pórtico de la entrada está revestido en granito. Por allí se accede a un hall (tiene 10 metros altura) desde el que se llega a dos grandes paliers donde están los ocho ascensores que llevan a los 27 pisos destinados a oficinas. El hall principal tiene los pisos cubiertos con lajas de San Luis y las paredes revestidas con mármol blanco.

Por su forma redonda, todo lo relacionado con los servicios (escalera y ascensores) queda en el centro del edificio, lo que permite que cada planta tenga mayor espacio para las oficinas. Además, tiene tres subsuelos que se usan para las cocheras y los pisos 28 y 29 se destinaron a la sala de máquinas y el tanque de agua. Lo curioso de “El Rulero” es que, en 1986, se convirtió en el edificio con el cartel de publicidad colocado a mayor altura en la Ciudad La estructura de la publicidad ocupaba una superficie de unos 600 metros cuadrados y para construirla se usaron 20 toneladas de perfiles de hierro y 10 de chapa galvanizada. Para iluminarla se colocaron unos 3.000 metros de tubos de alta tensión que funcionaban a gas de neón. El gran cartel mostraba los logotipos de las marcas Fiat y Peugeot, que por entonces fabricaba la firma Sevel Argentina, también propiedad de Franco Macri. En la actualidad, la publicidad es de la empresa de telefonía celular Claro.

Otra curiosidad: esa estructura también sostiene un monorriel con una cabina especial que puede moverse en forma horizontal o vertical. Esa cabina la usaban los operarios encargados de la limpieza exterior del edificio.
A pesar de todos esos aspectos técnicos, la Torre Prourban no gusta. Así lo demostró la encuesta publicada ayer. Sin embargo, “El Rulero” no se llevó el primer puesto entre los feos. El número 1 del podio le correspondió al Chateau Libertador, una torre de 50 pisos y mansardas francesas colocadas a gran altura. Está en Avenida del Libertador 7050, en el barrio de Núñez y ocupa casi una manzana. Lo inauguraron en 2010 y entre sus vecinos hay varios ricos y famosos. Pero esa es otra historia.